Una de las preparaciones japonesas más conocida internacionalmente es la sopa de miso, y después de publicar un artículo sobre que es y como se usa la pasta de miso no voy a dejar escapar la ocasión de compartir esta fabulosa receta, tan típica de la cultura culinaria del país del sol naciente.
La sopa de miso tiene una historia que se pierde en los siglos, y como para todo plato consumido a lo largo de los eones y extensos territorios, no hay “una” única receta para prepararla. Si bien hay combinaciones de ingredientes más conocidas, cada familia tiene “su” receta personal, y cada persona la prepara a su propio gusto.
Esta, claro está, no contiene nada de origen animal. Como comentaba en el articulo sobre el miso, normalmente es muy fácil eliminar todo producto de origen animal de las recetas japonesas más tradicionales, o mejor dicho, en muchas ocasiones la versión original es 100% vegetal, así que volvamos a los orígenes!
Si te preocupa no encontrar los ingredientes para prepararla, descuida, no tendrás muchas dificultades: se ofrecen en las tiendas de alimentación asiática o herboristerías, e incluso en muchos supermercados. Además piensa que, aunque sea bonito conocer sabores nuevos provenientes de otras culturas, que te falte un ingrediente no es razón para renunciar a tu sopa de miso personalizada, simplemente atrévete con los ingredientes que tengas en casa ;-)
Una ultima palabra. Podemos tener experiencias con sabores fuera de nuestro repertorio habitual, eso no tiene que ser algo negativo… es más, es algo muy positivo! Recuerda que todo alimento nos aporta nutrientes diferentes e igualmente necesarios para una buena salud, cuya base entre otras cosas es justo la variedad. Todo gusto excepto el de la leche de mama es aprendido, así que dale una oportunidad a esos sabores forasteros, enriquecerán tu paladar y tu mesa :-)
Acerca de los ingredientes:
- Las cantidades de ingredientes son aproximadas, te invito a experimentar y crear tu propia versión de sopa de miso!
- Hay muchísimos vegetales de hoja verde que puedes añadir a esta sopa, desde los más tradicionales en cocinado como berza, col, repollo, acelga, espinacas, hasta las menos tradicionales como bok choy, hojas de nabo, rábano, rabanito, zanahoria, remolacha, e incluso todo tipo de lechuga, berros, canónigos, que no se suelen asociar con sopas.
- También puedes elegir el tofu que más te guste (hay muchas variedades), aunque el tofu silken se suele disolver ^_^! Si te gusta genial, sino usa un tofu más firme!
- Recuerda que el miso es un alimento fermentado que perderá muchas de sus propiedades a contacto con una sopa caliente. Por esta razón lo preparo separadamente (abajo te cuento como) y lo añado cuando la sopa esté lista para comer, de esta forma lo consumiré caliente pero con cuantas más propiedades posibles. La sopa de miso se toma caliente -no solo por tradición sino porque si se enfría el miso se va hacia el fondo- pero las propiedades de un alimento se deterioran con el calor Y con el tiempo, si no les dejas mucho tiempo para perder propiedades… no perderá muchas!
- Para enriquecer tus sopas de miso utiliza las algas kombu y los hongos shitake que usaste para preparar dashi (receta aqui).
PS: Te has perdido el articulo sobre el miso, ingrediente indispensable en la cocina nipona? Pincha aquí!
La sopa de miso tiene una historia que se pierde en los siglos, y como para todo plato consumido a lo largo de los eones y extensos territorios, no hay “una” única receta para prepararla. Si bien hay combinaciones de ingredientes más conocidas, cada familia tiene “su” receta personal, y cada persona la prepara a su propio gusto.
Esta, claro está, no contiene nada de origen animal. Como comentaba en el articulo sobre el miso, normalmente es muy fácil eliminar todo producto de origen animal de las recetas japonesas más tradicionales, o mejor dicho, en muchas ocasiones la versión original es 100% vegetal, así que volvamos a los orígenes!
Si te preocupa no encontrar los ingredientes para prepararla, descuida, no tendrás muchas dificultades: se ofrecen en las tiendas de alimentación asiática o herboristerías, e incluso en muchos supermercados. Además piensa que, aunque sea bonito conocer sabores nuevos provenientes de otras culturas, que te falte un ingrediente no es razón para renunciar a tu sopa de miso personalizada, simplemente atrévete con los ingredientes que tengas en casa ;-)
Una ultima palabra. Podemos tener experiencias con sabores fuera de nuestro repertorio habitual, eso no tiene que ser algo negativo… es más, es algo muy positivo! Recuerda que todo alimento nos aporta nutrientes diferentes e igualmente necesarios para una buena salud, cuya base entre otras cosas es justo la variedad. Todo gusto excepto el de la leche de mama es aprendido, así que dale una oportunidad a esos sabores forasteros, enriquecerán tu paladar y tu mesa :-)
Acerca de los ingredientes:
- Las cantidades de ingredientes son aproximadas, te invito a experimentar y crear tu propia versión de sopa de miso!
- Hay muchísimos vegetales de hoja verde que puedes añadir a esta sopa, desde los más tradicionales en cocinado como berza, col, repollo, acelga, espinacas, hasta las menos tradicionales como bok choy, hojas de nabo, rábano, rabanito, zanahoria, remolacha, e incluso todo tipo de lechuga, berros, canónigos, que no se suelen asociar con sopas.
- También puedes elegir el tofu que más te guste (hay muchas variedades), aunque el tofu silken se suele disolver ^_^! Si te gusta genial, sino usa un tofu más firme!
- Recuerda que el miso es un alimento fermentado que perderá muchas de sus propiedades a contacto con una sopa caliente. Por esta razón lo preparo separadamente (abajo te cuento como) y lo añado cuando la sopa esté lista para comer, de esta forma lo consumiré caliente pero con cuantas más propiedades posibles. La sopa de miso se toma caliente -no solo por tradición sino porque si se enfría el miso se va hacia el fondo- pero las propiedades de un alimento se deterioran con el calor Y con el tiempo, si no les dejas mucho tiempo para perder propiedades… no perderá muchas!
- Para enriquecer tus sopas de miso utiliza las algas kombu y los hongos shitake que usaste para preparar dashi (receta aqui).
PS: Te has perdido el articulo sobre el miso, ingrediente indispensable en la cocina nipona? Pincha aquí!
Ingredientes
100 gr de puerro (o cebolleta, o ajetes, o chalotes)
150 gr de hojas verdes
300 gr de tofu
15 gr de miso (la variedad que más te guste)
Alga kombu y hongos shitake
1l de dashi (o caldo vegetal)
150 gr de hojas verdes
300 gr de tofu
15 gr de miso (la variedad que más te guste)
Alga kombu y hongos shitake
1l de dashi (o caldo vegetal)
Preparación
Calienta el dashi a fuego medio en una olla lo suficientemente grande como para que quepan todos los ingredientes. Cuida que no se caliente demasiado: si hierve fuerte es demasiado! Mejor mantenerlo por debajo del hervor, y solo el tiempo necesario.
Reserva un poco de dashi tibio en un pequeño bol en el que añadirás el miso, mezclando hasta que esté perfectamente incorporado. No te preocupes si se separa un poco, tiende a hacerlo y puedes darle otro mezcladito si hace falta, lo importante es que no tenga grumos.
Mientras tanto corta el tofu en cubitos, los puerros (o lo que elijas) muy finos, y trocea las hojas verdes (cuanto más fibrosas más finas).
Añade al dashi caliente el tofu y los vegetales que has elegido, pero solo si son fibrosos y necesitan cocinarse. Si elegiste vegetales tiernos resérvalos hasta el final, con el calor de la sopa se ablandarán sin destrozar su consistencia ni todos sus nutrientes. Recuerda que para que eso suceda, además del calor también hace falta tiempo ;-), no temas que pierdan todos sus nutrientes si los incorporas a la sopa justo antes de servirla y comerla, no será el caso.
Cocina la sopa a fuego lento, justo el tiempo suficiente para que los vegetales se vuelvan tiernos. Saca del fuego y sirve en cuencos individuales, añadiendo a cada cuenco la mezcla de miso y las hojas verdes tiernas que estén entre tus ingredientes.
Disfruta!!!
Una curiosidad. La sopa de miso se puede comer con palillos… Sí, sí, de verdad! De hecho, así es como se suele comer en oriente. En los países asiáticos no se considera de mala educación llevarse el cuenco de sopa a la boca y sorber (de hecho, ni se ve de mala educación hacer ruido sorbiendo, es una forma de apreciar la comida ^_^ ), y los palillos se utilizan para ayudarse a llevar a la boca los vegetales y el tofu… Las cucharas de porcelana se utilizan CON los palillos, no tanto para comer sino más bien debajo de los vegetales y el tofu, para acompañarlos en su trayecto desde el bol a la boca y recoger el dashi que gotee de ellos. Inténtalo y cuéntanos tus aventuras culinarias en los comentarios !!! ;-)
Reserva un poco de dashi tibio en un pequeño bol en el que añadirás el miso, mezclando hasta que esté perfectamente incorporado. No te preocupes si se separa un poco, tiende a hacerlo y puedes darle otro mezcladito si hace falta, lo importante es que no tenga grumos.
Mientras tanto corta el tofu en cubitos, los puerros (o lo que elijas) muy finos, y trocea las hojas verdes (cuanto más fibrosas más finas).
Añade al dashi caliente el tofu y los vegetales que has elegido, pero solo si son fibrosos y necesitan cocinarse. Si elegiste vegetales tiernos resérvalos hasta el final, con el calor de la sopa se ablandarán sin destrozar su consistencia ni todos sus nutrientes. Recuerda que para que eso suceda, además del calor también hace falta tiempo ;-), no temas que pierdan todos sus nutrientes si los incorporas a la sopa justo antes de servirla y comerla, no será el caso.
Cocina la sopa a fuego lento, justo el tiempo suficiente para que los vegetales se vuelvan tiernos. Saca del fuego y sirve en cuencos individuales, añadiendo a cada cuenco la mezcla de miso y las hojas verdes tiernas que estén entre tus ingredientes.
Disfruta!!!
Una curiosidad. La sopa de miso se puede comer con palillos… Sí, sí, de verdad! De hecho, así es como se suele comer en oriente. En los países asiáticos no se considera de mala educación llevarse el cuenco de sopa a la boca y sorber (de hecho, ni se ve de mala educación hacer ruido sorbiendo, es una forma de apreciar la comida ^_^ ), y los palillos se utilizan para ayudarse a llevar a la boca los vegetales y el tofu… Las cucharas de porcelana se utilizan CON los palillos, no tanto para comer sino más bien debajo de los vegetales y el tofu, para acompañarlos en su trayecto desde el bol a la boca y recoger el dashi que gotee de ellos. Inténtalo y cuéntanos tus aventuras culinarias en los comentarios !!! ;-)