Pero la realidad es que, hasta el día de hoy he encontrado muy pocos embutidos vegetales que me gusten. Estas salchichas, a pesar de ser ecológicas y de una marca supuestamente sana, sorprendentemente tienen ese sabor “artificial” de los embutitos hiperprocesados de origen animal, y claro, un chasco. No que sepa a carne de ningún tipo, es más bien ese retrogusto a “plastico”, común a muchos productos industriales. Las consumí justo después de comprarlas, dejándolas solo una noche en la nevera así que no fue cuestión de que estuvieran pasadas. Simple y llanamente su gusto es bastante desagradable (por lo menos para mi).
Intenté comer la primera salchicha estilo hot dog aunque no hubo forma, y mira que la mostaza normalmente me ayuda a olvidar el sabor no muy “perfecto” de los productos sustitutivos. Pero ni modo, tuve que recurrir a los pepinillos en vinagre para que su fuerte sabor cubriera los demás… La segunda salchicha (hay dos en la confección) la utilicé como relleno para fajitas, con muchos otros ingredientes para camuflar el retrogusto y para no tirarla (no me gusta tirar comida), sólo de esta forma pude terminarlas.
A parte ese gusto artificial que queda en la garganta después de haberlas comido, estas salchichas realmente no tienen mucho más sabor que se diga. Suele ser el caso en productos hechos con cereales y legumbres que intentan replicar productos de origen animal: si no están especiados muy cuidadosamente no saben a nada. Honestamente, así como no echo de menos las salchichas de origen animal, definitivamente no voy a echar de menos estas.
Y no solo por su sabor.
Porque además de saber a rayos (en mi opinión, claro está), este es un producto altamente procesado, contiene un gran porcentaje de gluten, un 18% de grasas (de las cuales un 2% saturadas), y por acabar, comiendo dos de estas salchichas estarás comiendo el 50% (el 50%!!!) de la cantidad de sodio recomendada para ese día!!!
Lo único que, en mi opinión, tienen de positivo estas salchichas vegetales es que los ingredientes son en su mayoría de origen ecológico. Pero esto de ninguna forma las salva, porque de un lado evitan agroquimicos, y de otro les meten numerosos aditivos -dos de los cuales mutagénicos (carragenato y aroma de humo) y uno a usar con precaución (sulfato de calcio). Encima estos aditivos los incluyen en la etiqueta sin su código E- porque ya sabes, este es un producto super mega natural, o eso se supone. Creo que incluso el etiquetado está al limite del fraude alimentario, ya que según la legislación vigente “el aroma de humo no puede ser asociado al termino “natural” para evitar la induccion al error del consumidor”.
He elegido no participar en la explotación, sufrimiento y muerte de seres animales. No quiero ser responsable de grandes injusticias sociales y el rápido deterioro de nuestro ecosistema. Además cuido de mi salud y de la de mis seres queridos.
Esto no me convierte en una idiota. Antes de volver a comer ese oprobio de salchicha, me quedo mil años comiendo rollitos de berza.
Tomad nota:
Hay un mercado allí fuera de personas como yo, que nos planteamos todo lo de arriba cada vez que hacemos la compra. Estamos dispuestas a molestarnos para buscar lo que queremos, e incluso a pagar algo más caros los productos de marcas de confianza. Mi sugerencia es que no desaprovecheis de este mercado, porque así, con estos productos de calidad tan ínfima (y a casi 20€ al kilo!!!), lo estais perdiendo.
Es más que posible sacar al mercado un producto sustitutivo con un sabor muy agradable, hay personas y empresas que ya lo hacen. En general, los productos alimenticios se testan en grupos de prueba (de humanos que lo comen y dan su opinión) antes de lanzarlos. Excepto al parecer los que se venden por tener una imagen "natural" y "saludable". Y si la opinión de los grupos de prueba es negativa, se modifica la fórmula hasta producir algo que guste. Así de fácil, se hace para TODOS los productos.
Además, me puedo perfectamente imaginar que personas que estén empezando su cambio, ese cambio tan necesario para todo el mundo, puedan llevarse la impresion de que todos los productos sustitutivos sean así de horribles, de sabor y de calidad. Estas salchichas pueden ser la razon por la cual den un paso hacia atrás. Y eso me cabrea, y mucho.
Cuántas veces hemos oido "uy, no me des más de esa comida tan rara, a mi dame una salchicha de verdad, no voy a comer nunca más vegano!" en algún restaurante, reunion, excursion? Con lo dificil que es convencer a la mayoría de las personas de nuestro entorno a que PRUEBEN simplemente productos diferentes (en este caso 100% vegetales), sólo nos falta topar con algo así para que dejen de querer hacerlo durante el resto de sus vidas.
El sabor? Normalmente es muy importante (comenos porque NOS GUSTA). En este caso aún más. Es con el sabor que las personas hacen "click" y se dan cuenta de que el cambio, no es tan complicado.
Este tipo de productos consiguen justo el efecto contrario.
OJO: la mayoría de los productos de esta gama contienen derivados de huevo y leche.
Lista de Ingredientes
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Peso | 200gr | Cal x100gr | 277 | Tipo | Frío |
Precio | 3.79€ | Precio x kg | 18.95€ | Embalaje | Plástico |
Positivo. Ingredientes en su mayoría ecológicos | Negativo - Producto muy procesado - Numerosos aditivos alimentarios, entre ellos dos mutatagénicos - Contiene alergénos (trigo, soja) y grasas saturadas - Elevado contenido de sodio - No es local - No es de temporada - No es crudo - Empaquetado de plástico (por favor, no olvides reciclar) |
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